Salatiel Barragán Santos
A unos 150 km de Morelia su capital y casi a la misma distancia de la Ciudad de México, se encuentra el Pueblo Mágico de Tlalpujahua, Michoacán, es un lugar ideal para visitar en cualquier época del año.Este antiguo pueblo virreinal del siglo XVI, permite adquirir notables artesanías como piezas de popotillo, alfarería, arte plumario, cerámica artística, labrado en cantera, hierro forjado, orfebrería en plata y latón, muebles de madera, y principalmente su mejor creación: las esferas navideñas hechas con calidad de exportación, que llegan hasta los mercados de Asia y Norteamérica. En su centro y sobre una elevación está el Santuario del Carmen del Siglo XVII, hasta donde entroncan varias calles flanqueadas por antiguas casas y casonas; todo rodeado por sinuosas calles empedradas que han sido locaciones de varias películas de terror, además, están las ruinas de la Capilla de Nuestra Señora del Carmen sepultada en 1932.
Tlalpujahua es muy importante en la elaboración de artículos navideños para México y el mundo; se estima que cada año se elaboran alrededor de 100 millones de esferas en más de 200 modelos; en cada calle y en muchas casas encontramos que cientos de personas se dedican a la transformación artesanal del vidrio, para elaborar a mano miles de esferas, además, en cada taller surgen pintores, diseñadores y vidrieros que continúan con los métodos tradicionales: son creadores de bellas piezas, frágiles, delicadas como pompas de jabón, pequeñas o grandes, transparentes o de colores brillantes, que adornarán hogares lejanos en Japón, Canadá o Estados Unidos. En cientos de casas casi toda la familia participa de esta actividad productiva, cada creador trata de innovar y ser mejor que su vecino, con cada soplo a través del tubo de cristal producen una nueva esfera: son obras de arte por lo general efímeras o que sólo se usarán una vez al año.
En Tlalpujahua cada fin de año las calles se transforman y se torna en un pueblo navideño con la “Feria de la Esfera” que ofrece millones de esferas de todos tamaños, modelos y colores, a precios bajos; otro singular evento tiene lugar en octubre, es el “Feratum Festival Internacional de Cine Fantástico, Terror y Ciencia Ficción,considerado entre los festivales internacionales cinematográficos de género fantástico más importantes del mundo. En esta zona del oriente michoacano es posible visitar una mina-museo, pueblos mineros, serranías cubiertas por bosques de pinos,así como los Santuarios de la Mariposa Monarca. Además, en este Pueblo Mágico, se disfruta de la más variada gastronomía como barbacoa, carnitas, tacos de res y de cabeza, mole de guajolote, huchepos, corundas, sopa mazahua y de hongos, tamales, pan casero, y otros platillos regionales, así comodulces cubiertos, conservas de frutas, y los más deliciosos licores de hierbas o frutas.
ANÉCDOTA OVNI. Conocido como “Don Fili”, el Señor Filiberto Marín Jiménez, dueño del Hotel Mineral y promotor del Fest FERATUM, nos comentó: “A mediados de los años 80’s, hace como 30 años, una noche cuando manejaba por la carretera desde Toluca, conmigo venía mi esposa y otras 2 personas, y otro auto nos acompañaba de cerca, y poco después de pasar la ciudad de Atlacomulco hacia Tlalpujahua, a lo lejos, a mitad de la carretera vi unas luces fuertes de colores, supuse se trataba de una patrulla de la policía y dije a todos, que habrá pasado; al acercarme a menos de 100 metros, pude apreciar mejor que se trataba de un objeto luminoso con forma de bola que tenía intensas luces rojas, azules, verdes, y otros tonos, todos giraban hacia arriba y al alrededor; era de tamaño mayor a un auto; al acercarnos más y casi al llegar al objeto, vimos que flotaba sobre el piso, de pronto se elevó poco a poco de manera vertical, emitía un extraño sonido, así subió hasta que desapareció. Todos salimos de los autos, asombrados nos preguntamos que era ese objeto, para nosotros fue un OVNI porque no encontramos otra explicación lógica”.
